El cepillado diario es la mejor forma de proteger los dientes y las encías, pero para que ejerza eficazmente su función no basta con una buena técnica; también influyen las herramientas con las que se lleva a cabo: el cepillo y la pasta dental.

 

Una pasta de dientes óptima es aquella que tiene acción antimicrobiana y protege contra la caries y las enfermedades periodontales.

 

Hay que elegir la pasta dental en función del estado de nuestra boca.

Si tenemos sensibilidad dental, encías inflamadas u otras enfermedades, tenemos que escoger la pasta más adecuada en ese caso. Si tenemos una boca sana, lo mejor es elegir una pasta que contenga flúor para fortalecer el esmalte y la estructura, eliminar la placa y así prevenir la caries.

 

Consejos básicos para la elección de una pasta dental adecuada:

 

Si has dejado que se acumule mucha suciedad no superficial en tus en tus dientes no importa si te cepillas con mucha fuerza y con mucha constancia porque no lograras eliminar esa suciedad con las pastas dentales. Debes acudir a tu odontólogo de confianza para que te realice una limpieza dental profesional.

Usar pastas para la sensibilidad dental si tienes dolor al tomar alimentos fríos o ácidos.

No comprar dentífricos que contengan menos de 1000 ppm de flúor, porque será como cepillarnos sin pasta dental.

No enjuagarse la boca después del cepillado, ya que eliminamos los principios activos que han de actuar sobre nuestra boca.

No olvidar de cepillarse la lengua utilizando el cepillo dental o los instrumentos adaptados para dicho uso.